Cine TV: Casper

(Casper, 1995)

Conocido en México como Gasparín, el fantasma amistoso tiene una marcada afectación por la melancolía. Se aburre en la soledad de su mansión, donde es objeto de bullying de parte de algunos de sus compañeros espectrales, con los que comparte encierro forzado. Nada lo anima, Hasta que llegan a la mansión un despistado inventor cazafantasmas y su hija vivaz, que lo hacen sentirse… vivo.

Brad Silberling condujo este arriesgado proyecto lleno de efectos especiales, que fueron innovadores para su tiempo, con un ánima translúcida, que se asemeja mucho a la figura de la serie de televisión que popularizó al personaje. Casper es muy bueno para asustar, aunque, en el fondo, quiere cariño, a diferencia de sus tíos, que no desperdician oportunidad para incomodar a quienes se adentran en el caserón.

Como subtrama hay una búsqueda del tesoro de los ambiciosos Cathy Moriarty y Eric Idle, que contratan al señor que puede dialogar con los espíritus para que consigan ahuyentarlos y así puedan ellos apropiarse de la fortuna oculta.

Casper es una entretenida aventura que le divertirá mucho a los niños, con una presencia sobrenatural que, más que aterrorizar, resulta adorable.

(PG. Orientación de los padres)

Netflix

Twitter @LucianoCamposG