Un intenso Réquiem de Verdi cautiva al público en Torreón
Con la participación de destacados solistas, dos coros con 115 voces en escena y una gran orquestación, Camerata de Coahuila presentó este fin de semana por primera vez en su historia y en Torreón el Réquiem de Giuseppe Verdi (Messa da Réquiem), en el escenario del Teatro Nazas, bajo la dirección de Ramón Shade.
Es una obra concebida post mortem en honor primero a Rossini y después a Alessandro Manzoni, amigo de Giuseppe Verdi; en la que el público pudo disfrutar en alrededor de una hora y media de una experiencia musical dramática, romántica y sobre todo muy virtuosa.
El réquiem constó de siete grandes movimientos, el segundo de ellos con ocho fragmentos que en su conjunto ofrecieron un pasaje que se asemejaba a una misa coral y en momentos tomaba la intensidad de una ópera.
De acuerdo con las notas al programa, la Messa da Requiem es la única obra a gran escala de Verdi que no está concebida para el escenario, posee un estilo teatral, con pasajes de gran ternura y sencillez que contrastan con secciones intensamente dramáticas. En aquel entonces, el eminente director de orquesta y pianista Hans von Bülow lo describió acertadamente como «la última ópera de Verdi, con ropas de iglesia»
El concierto contó con la participación de la soprano Marcela Chacón, la mezzosoprano Rosa Muñoz, el tenor Eduardo Niave y el bajo José Luis Reynoso. Además de la colaboración de los coros del Instituto de Música de Coahuila, dirigidos por Luz Alicia Ávila, y del coro de la Compañía de Ópera de Saltillo, dirigido por Alejandro Reyes-Valdés.
Por momentos la obra mostró una musicalidad imponente, con la participación de las secciones de cuerdas, percusiones y alientos de metal y de madera en toda su intensidad. En esta ocasión, la fuerza de los metales vibró en todo el recinto, incluso cuando en un momento los trompetistas se colocaron entre el público para dar mayor énfasis a la música.

El Réquiem es una obra donde cada parte de la orquesta, las voces del coro y los solistas son protagonistas. La obra comienza con toda la orquesta, coros y solistas, después cada una de las voces va tomando un papel principal, hasta terminar el último movimiento con la voz de la talentosa soprano Marcela Chacón.
La Messa da Requiem contó con una gran respuesta del público en las dos funciones el 6 y 7 de junio, con alrededor de 75 por ciento de las localidades ocupadas.