No
(No, 2012)
Es 1988 y el presidente Augusto Pinochet convoca en Chile a un referéndum para someterse a los designios del pueblo: serán ellos quienes decidirán si permanece en el poder, perpetuando la dictadura militar, o si quieren elecciones para elegir a su gobernante.
En este ambiente de enorme expectación efervescencia política, aparece un publicista que definirá el futuro de la nación andina.
La cinta dirigida por Pablo Larraín, basada en la obra de Antonio Skarmenta toma elementos de la realidad para celebrar la democracia y dejar testimonio del poder del pueblo unido.
Gael García Bernal, con un muy bien acentuado tono de chileno, interpreta a René Saavedra, el genio publicista que se encarga de conducir la campaña del No, para que el pueblo rechace al dictador. Lo que hace el comunicador es enfatizar los contenidos que deberá transmitir a lo largo de un mes, concentrándose llevar un mensaje de la alegría que provocará en el pueblo la liberación de un régimen opresor.
Retrato de una época que se fue, queda como un recordatorio de un tiempo de decisiones que le dieron forma a un país. La recreación de la época es impecable, y las actuaciones muy buenas de Gael, Néstor Cantillana y Antonia Zegerse, entre otros integrantes del casting.
Es cine político latinoamericano de excelente hechura.
(R. Restringido; menores de 17 deben estar acompañados de sus padres)
Netflix
@LucianoCamposG