La huella artística de Gustavo Montes

  • El artista con más de 30 años de trayectoria, conversó con La Vereda sobre su exposición en La Casa del Cerro.

De un momento cotidiano como les recuperar un objeto del suelo, en este caso un bastidor, nace un acto de creatividad y una explosión de colores que atrapan la vista. Es la exposición “Revaloración del desecho” del artista lagunero Gustavo Montes, que se encuentra en exhibición en la pinacoteca del Museo Histórico Casa del Cerro. Permanecerá durante el mes de abril.

La exposición, integrada por 30 obras que se recorren con placer en la mirada, ha tenido buena respuesta, comparte el autor. Junto con otros museos municipales, la Casa del Cerro es de los pocos recintos culturales abiertos en la ciudad por la pandemia.

¿Cómo nace el título de la exposición?

“Yo he recogido bastidores rotos, les quito la tela y les pongo tela nueva. Este era de Román Eguía, lo que hice fue restaurarlo, apliqué otro capa,  entonces ves a Román y ves a Gustavo Montes”, platica mientras muestra el primer cuadro que abre la exposición.

“Anteriormente ya había trabajado en intervenir cuadros de otros artistas, cuando descubrí que es la firma de Román, lo restauré, quise poner mi huella sobre el cuadro, lo que llaman los grafiteros, intervenir la pintura. Lo hice con el sistema que tenía esa misma pintura.

Después viendo que tenía otras cosas, en ventas de cochera y cuadros tirados, hice la exposición con ese sentido, de esas cosas que la gente desecha y ya no les tiene ningún sentido. No les significa en absoluto, por eso es Revaloración del Desecho”. 

“A partir de eso hice la serie que tiene las mismas dimensiones del cuadro, manejando la colometría y los efectos de la pintura barrida, fui desarrollando la exposición. 

La revaloración del desecho tiene que ver tanto en la apreciación estética y emotividad hacia el objeto. El objeto obtiene otra posibilidad de mirarlo”.

La exposición de Gustavo se puede apreciar en dos salas, en la primera sobresale en medio un objeto convertido en obra de arte. Es una batea del siglo XIX que usaban antiguos pobladores para mezclar diversos materiales.

“Esta batea es un regalo que me hizo Román Eguía, le apliqué un sentido pictórico. Es un objeto del Siglo XIX, adquiere un sentido distinto, ese diálogo entre un objeto desechado y un objeto ofrendado, termina el circuito de la exposición”.

En los otros cuadros, hay una unidad de formas expresivas. Así lo explica el autor:

“Es el mismo gesto de aplicación de la pintura, una manera de barrer la pintura y encontrar valores cromáticos”.

Por otra parte, habló de cómo la condición de los artistas es complicada en pandemia:

“En el arte, a lo mejor mucha gente ha vendido por los sistemas electrónicos, pero mucha gente no, porque no tiene el contacto físico con el objeto, una cosa es verlo en pantalla y tener las dimensiones del objeto fisico. Muchos compañeros que nos dedicamos al arte, en esta situación de pandemia nos la hemos visto bastante duras, porque no ha habido venta, a menos que en algún momento alguien encargue algo…”

Finalmente, Gustaco expresó que la exposición ha tenido buena respuesta: “Hay gente que viene al museo ex profeso a verla, a cierto grupo le ha causado interés, y este es de los pocos museos que están abriendo en La Laguna y que tienen las condiciones para ser visitado. El espacio es generoso, se pueden guardar las indicaciones de salud”. 

Excepto los días de la Semana Santa, el Museo Casa del Cerro abrirá sus puertas durante todo abril.